miércoles, 30 de noviembre de 2005

Pecar de vanidad

Yo que siempre he luchado contra la arrogancia, hoy me permito una excepción pecando de vanidad. Y es que unas fotos que me hizo Belén Cerviño (una gran fotógrafa y muy guapa) han sido publicadas en el número de diciembre de la revista SuperFoto. Y quiero compartir esta alegría que tengo hoy con vosotros.


martes, 29 de noviembre de 2005

Ángeles Caídos


Paseando por el céntrico parque del Buen Retiro, me tropiezo con una escultura misteriosa, el Ángel Caído de Ricardo Bellver. Cuenta la historia que Luzbel el ángel más bello del cielo, se rebeló contra Dios y en un acto de soberbia pronunció el famoso: ¡Non serviam! (No le serviré). Luzbel (también llamado Lucifer) fue condenado al infierno no por soberbio, sino por rebelde. El Ángel Caído bien podría ser un eslogan de la adolescencia, donde el niño que va descubriendo al mundo, se rebela contra él. El simple hecho de defender tu libertad a elegir y rebelarte contra lo establecido, hoy día está demonizado y pasas a ser un Ángel Caído. Los querubines actuales tienden a encogerse de alas, en vez de desplegarlas y volar hacia la apetitosa y morbosa manzana de la que mordió Eva. En su canción más famosa Machín decía: “Siempre que pintas iglesias pintas angelitos bellos, pero nunca te acordaste de pintar un ángel negro”. Pocos cuadros hay de Ángeles Caídos, supongo que por la gran dificultad de plasmar en un lienzo la libertad y la rebeldía que suponen. Si usted es pintor y se atreve a pintar a Lucifer, yo con mucho gusto estoy dispuesto a presentárselo...

Llaves

A lo largo de la vida, por unas cosas o por otras, vamos cambiando nuestro lugar de residencia, nuestra casa...
Cada vez que abandonamos una casa, nos llevamos los muebles, nos llevamos los recuerdos, pero no podemos llevarnos las vivencias... Hay quien dice que si las paredes escucharan... Yo creo que las paredes escuchan y ven; son testigos de nuestra historia en el espacio de tiempo que compartimos existencia con ellas, pero a pesar de todo, no hablan.
Hace ya algunos años, algunos me llamaban el sereno, porque llevaba tres llaves colgadas del cuello a modo de amuleto... Luego dejaron de llamármelo, pero pasé a tener cuatro llaves al cuello, más tarde cinco, y pasados un par de años desde entonces, dejé de llevar cualquier tipo de amuleto, si bién llevaba 7 llaves en el llavero, 9 a día de hoy...
Quizás esté mal de la cabeza, puede que algún día se me pase, puede que no se me pase nunca, lo cierto es que conservo una copia de las llaves que han ido guardando mi casa a lo largo de 22 años. Porque siempre que dejamos una casa, podemos pasar por delante alguna vez y decir "ahí viví yo hace tanto tiempo". Las llaves nos aseguran que, si nada ha cambiado, tendremos el privilegio de entrar hasta el fondo a la casa que un día fue nuestra, pues la historia sigue abierta. Si las llaves no valen, quiere decir que es una etapa cerrada definitivamente en nuestra vida, y que solo nosotros podemos reabrir si tenemos las llaves pertinentes.
Es probable que por eso nunca entendiera alguna que otra canción, y que dentro de medio siglo, cuando tenga vete a saber cuantas llaves, algún día, vuelva a recorrer todo el itinerario a la busca de si esas casas siguen existiendo, y si existen, ver si conservan la misma llave. Cuestión poco probable dentro de cincuenta años, puesto que seguramente las puertas tengan unos sistemas mucho mas chic y tecnológicos, pero siempre quedará el romanticismo de las llaves, y la idea de que no es necesario morir, ser incinerado y esparcido para estar en varios sitios a la vez, o para permanecer en el tiempo de alguna manera.
Seguramente la solución esté en coger una pequeña barca y, con nuestra historia escrita en ellas, tirar nuestras viejas llaves para que descansen en el fondo del mar(matarile-rile-rile).

[¿Quién se acuerda de tí?][Mikel Erentxun][Acróbatas]

lunes, 28 de noviembre de 2005

Luces y sombras


Esta tarde de luces y sombras me he dedicado a mirar a través de la ventana empañada por el frío de estos días invernales, y he visto caer un pájaro inerte del cielo. Es la primera vez que veo esto y se ha perfilado en mis labios una ligera sonrisa, cual Mona Lisa de Da Vinci, a la vez que mis ojos denostaban una mirada triste y de decepción profunda. He recordado entonces los días de colegio en los que la profesora nos enseñaba con infinita paciencia las distintas especies y clasificaciones de seres vivos: carnívoros, herbívoros e insectívoros. De éste último grupo nos ponía como ejemplo a la gran mayoría de las aves, y observábamos en nuestros libros tan bien ilustrados a un petirrojo de colores vivos, que se te antojaba que debía ser feliz, joven, inmortal y libre observando simplemente sus ojos tan negros y vivaces. Pero nada más lejos de la realidad, esas criaturas tan alegres y cantarinas también tienen un fin, una muerte espantosa que acaba dando de bruces con el asfalto, vamos, mas o menos como el final de nuestra relación.
Si bien yo no sé todavía muy bien en que grupo de seres vivos me encuentro (carnívoro muy de vez en cuando), a partir de hoy no quiero ser ave, me dan miedo las alturas. La caida es mucho mayor. Allá tu si quieres ser ave y encima carroñera.

jueves, 24 de noviembre de 2005

Con salsa agridulce


Ligar en internet es un chollazo. Eso de poder elegir a la persona que te gusta a través de fotos y un texto, que el canditato redacta, es muy cómodo. De una forma muy superficial, eso sí, vas seleccionando a la persona que te gustaría conocer. Aunque la mayoría de las veces provoca un fracaso estrepitoso. Esta forma de conocer gente está siendo un notable éxito en todo el mundo, a pesar de que se producen fraudes por partes de las empresas, como ha revelado un estudio de la revista alemana Test.
Uno de esos pretendientes que conocí a traves de una de estas páginas de flirteo me contó una historia tan romántica como triste. Él había decidido irse a estudiar a San Sebastián y se fue con su amigo de toda la vida, que también decidió continuar su formación. Vivieron juntos durante meses hasta que un día, el amigo de mi conocido le confesó su homosexualidad. Con mucha sorpresa y empatía él también le manifestó que era más de carne. Meses después empezaron una relación, en secreto y que nadie sospecharía. Para lo que la familia era un simple compañero de piso, se había convertido en la persona más importante de mi amigo online.
Uno de esos días en los que te vuelves muy valiente, decidieron decirlo en casa y contarlo. En sus casas no les creían, ambos siempre habían estado de broma con todo, pero este era un asunto muy serio. Me contaba que aún hoy muchos no se lo creían.
Siguieron en San Sebastián, juntos y felices. Un día, cuando ya llevaban más de 4 años compartiendo amor, la pareja de mi contactado sufrió un accidente y le dejó el corazón roto y solitario. En ese momento, a mí se me estremecía el cuerpo. Querer a alguien con tu vida y que de repente, se vaya. En una de mis preguntas acertadas (que a veces tengo) le dije que si le gustaba la estabilidad. Me dijo que él hubiera sido para toda la vida.
Aunque se haya ido, siempre quedará en su corazón, en su recuerdo. Una de las formas más bonitas de no morir.
Esta es una gran historia de amor. Siempre he pensado que las grandes historias de amor terminan de una forma trágica. No sólo se ve en las películas de Hollywood, también en la vida real. Un camino que es agridulce pero que merece la pena andar.

Sms (Times goes by)

Para no variar la tónica general de mis mensajes, muchas veces me planteo(Me llena de orgullo y satisfacción...) lo absurdo que es tener agenda en el móvil. No vale muchas veces para nada. Salvo los números que uno más usa, y los números que uno usa a lo mejor cada tres o cuatro meses, los demás... Las agendas de los móviles están a veces llenas de números de personas que no sabemos ni quienes son ni cómo han llegado a nuestro móvil, en contraste con lo que a veces puede llegar a ser una desesperación, de no tener en el móvil el número de la persona o las personas que si te gustaría que estuvieran en tu agenda.
Si fueramos capaces de recordar el órden, con día, fecha y hora en que hemos ido agregando los nombres a la agenda, nos encontraríamos con que tenemos una mini-biografía personal en ese instrumento del movil siempre tan útil a veces y tan inútil el resto que es la agenda del móvil.
En el caso de que apuntes tus números en el móvil, porque hay gente que tiene la agenda vacía... No es mi caso. Lo mío es más grave, manía persecutoria que lo podríamos definir, de guardar(desde que los móviles tienen más espacio que para 20 mensajes) todos los mensajes que entran al móvil, de forma que uno puede ponerse a analizar mensajes desde hace dos años, y tener una guía del día a día que ha envuelto esos últimos 24 meses... ya se sabe, 24 meses, 24 causas(o 24000 mensajes). ¡Cuánto dinero en sms! ¡Si me paro a pensarlo y tengo una fortuna en el móvil! En concepto de mensajes que me han enviado claro... Yo siempre envío menos XD
Pero no deja de ser curioso guardar todos los mensajes que te envían... Te hacen recordar mucho mejor las situaciones ya vividas, son como una especie de chuleta... Y te hacen ver también que hay veces que han pasado muchos días y poco tiempo, y rachas en las que han pasado pocos días y mucho tiempo(esta tarde lo comentaba con Aganzo, de Febrero a ahora parece que nos han pasado tres años a cuestas, ¡y solo han pasado nueve meses!). Para a fin de cuentas, seguir casi donde uno mismo estaba... sabiendo más cosas de las que sabe y habiendo avanzado en la partida claro está, y con algunas tramas resueltas y algunos baches superados(casi), pero a fín de cuentas, casi igual...
Así es que creo que el tiempo en cierto modo, aunque tenga medidas universales, es disforme en nuestra mente... porque los días pasan muy rápidamente, pero haciendo balance general, el resultado es que el período ha sido bastante breve(o bastante largo según cómo, porqué, y cuando se mire).

[Hung up][Madonna][Confessions on a dancefloor]

(¡Agradecimientos a Kike que ha sido el que me ha regalado Confessions on a dancefloor!)(¡Y saludos a Paco, que no se quién es, pero se que nos lee!!!)

martes, 22 de noviembre de 2005

Las castañas vasallas

A menudo me pregunto si cuando la gente toma sus decisiones, sopesa bien las consecuencias de estas. Porque la importancia de una acción o decisión no está en el resultado inmediato o la solución del problema, sino en lo que farmacéuticamente se conoce como efectos secundarios, o daños colaterales como dicen otros. El problema es que a veces, solucionando un problema se crea otro problema, igual o peor. Con la dificultad añadida de que estos problemas no son tan aparentes como "la solución", sino que a pesar de ser más graves, son en cierta manera invisibles, porque cuando se hacen visibles tienen ya dificil enmienda posible.
En la vida hay peores cosas que una traición, esto es, la lealtad incondicional, porque una vez aparece la traición, esa vieja lealtad ilimitada se puede transformar en un sucio avasallaje, tan sucio que es invisible hasta que no tiene vuelta de hoja, con el consabido proverbio de que no es traidor quien avisa.
Personalmente, yo siempre he preferido las guerras psicológicas a las guerras abiertas, porque es en las que mejor me desenvuelvo y en las que, si no gano, soy el que menos pierde.
Seguramente no tan a menudo, pero también con cierta regularidad, me pregunto porqué hay gente que en las partidas de ajedrez prefiere sacrificar la reina para salvar un peón. No por especial manía a los peones, sino porque está firmando su derrota; lo peor de todo es que sabe de sobra y es consciente de que la reina en el ajedrez es más útil que el peón, pero aún así prefiere sacrificar a la reina. Y es una pena jugar mal al ajedrez cuando las fechas navideñas están tan cerca y la castañera te va a ser tan necesaria...
El problema reside en que la castañera te va a intentar chamuscar vivo mientras asa las castañas inocentemente... De forma sucia, pero elegante... aunque no esté de moda, las castañeras también tienen su glamour...
Así es que como sé que no leerás en persona el mensaje pero sí algún chivato tuyo, pues avisado quedas, aunque no sepas que las castañas van para tí.

jueves, 17 de noviembre de 2005

Ovejas

¡Qué triste es la vida de una oveja! Sin poder salirse nunca del camino marcado, siempre yendo por el camino junto con su rebaño. Una oveja con ansias de libertad debe tener una frustración enorme. Nunca seré una oveja.
Miles de estos animales se concentraron en Madrid, muchos de ellos sin saber porqué. Para pedir que se quite la LOE. En teoría reivindican que la asignatura de religión sea evaluable para el expediente. Pero a parte de los pastores que, micro en mano, manipulan al rebaño y les guían hasta la puerta de Alcalá, luego quedan las ovejas.
Gente que no sabe muy bien porqué va, niños traídos por sus padres, hasta abuelos...
Los 15 millones de personas que se concentraron apoyados por Jiménez Losantos y su familia son ovejas de la emisora de Dios. Hace unos días un conocido me decía que un familiar había acudido a la manifestación convocada por las asociaciones cristianas. Me comentaban como anécdota que acudió con su hija china adoptada. La menor gritaba "Zapatero tírate un pedo", mi conocido se rió. A mí también me hizo gracia imaginarme a la pequeña niña de ojos rasgados gritando. Aunque luego le expresé lo triste que me parecía que una niña gritase contra un político, tanto como si fuera a favor. Y pensé en todos los niños que, para hacer bulto, habían sido llevados a la manifestación. Niños manipulados, utilizados para fines políticos. Me parece tristísimo.Estos padres no pueden protestar por una ley de educación sino saben lo que significa educar a sus hijos de una forma sana.

lunes, 14 de noviembre de 2005

Sábanas límpias, sábanas santas.

Creo que como en este país la gente se ha lanzado a ver quién dice la gilipollez más gorda, yo no voy a ser menos, culo veo culo quiero, como los niños...
A la gente podríamos clasificarla de dos formas, los que cambian las sábanas una vez a la semana o más porque se ensucian, y los que las cambian una vez a la semana o más por higiene o porque son unos maniáticos de la limpieza, y se deprimen de ver la lavadora vacía. Podríamos hacer un tercer grupo con los que no cambian las sábanas nada más que en mayo para poner las sábanas de verano y en octubre para poner las de invierno, pero a esos los podemos englobar a todos en el grupo de los guarros, que hoy no voy a entrar a analizar, porque son un cosmos completo para analizar.
Como decía antes, podemos dividir a la gente en dos secciones básicas, que son los que ensucian las sábanas y los que las cambian limpias, estos últimos, creo que inocentemente, tan obsesionados con la limpieza que pretenden que los demás cambien también las sábanas sin ensuciarlas...
Y yo me pregunto, ¿porqué la gente que es infeliz se empeña en que los demás seamos también infelices? ¿No pueden gozar de su infelicidad para si? Parece ser que son tan generosos que no les basta, quieren que todo el mundo sea partícipe de su placer oculto de ser infeliz.
Y digo esto porque esta gente, que no folla, o folla solo para tener hijos, o que ya ni puede follar de tantos hijos que tienen que no hay quien eche un polvo en paz por la noche, van a hacer nos ver próximamente que lavar las sábanas limpias importa.
Después de padecer el 18J "Que los maricones tengan los mismos derechos que los demás si importa" y del 12N "Comerle el coco a los niños en las escuelas también importa/Todos somos la COPPE/Y no nos manifestamos el 19N porque si no luego estamos cansados para ir a la manifestación en memoria del enano", habrá que sumarle próximamente la manifestación, sin fecha aún fijada, que tendrá como lema "Súmate al reto del agua. Si entra limpia en la lavadora, que salga limpia también, que así luego te la puedes beber, asi que lava las sábanas de la cama limpias/No folles, que salen granos en la cara y callos en las manos".
Para quien no lo sepa, estas cosas que ahora nos parecen nimias, pasarán a la historia... Si el otro día un señor pedante, que además de decir cosas de bastante mal gusto, dijo que "en 1989 el mundo asistió a dos acontecimientos que cambiaron la historia: la caída del muro de berlín y la película de ese año de woody allen", yo me aventuro a decir que, igual que en los libros viene aquello de que "el 12 de Octubre de 1492 Cristobal Colón descubrió América", que yo me pregunto ¿América estaba guardada en un sótano y yo soy un mal pensado, o América estaba ya ahí de antes esperando a que algún europeo llegara? ¿Y si se hubiera subido un indígena al barco y le hubiera dicho a Colón "¡Qué subidón! ¡Acabo de descubrir Europa!"? Pues igual que eso, vendrá la histórica efeméride "El 18J la Conferencia Episcopal descubrió las manifestaciones en la calle, aunque el PP las descubrió dos semanas antes".
Aún así, dejo unas preguntas al aire: ¿Cómo iban los curas antes de la Iglesia a la Panadería? ¿En metro? Porque mira que no ver antes la calle... ¿Porqué los curas se manifiestan contra el gobierno porque les vaya a quitar dinero, y no se manifiestan porque no suba el presupuesto para la lucha contra el hambre? Si los curas no tienen hijos... ¿Qué coño les importa las asignaturas que se den en las escuelas, si no les afecta a fin de cuentas? Aaaaah, que los curas sí que tienen hijos... ¿Fuera del matrimonio? Ah no, que son como las monjas, que están casados con Dios... pero si Dios es hombre... ¿Es un matrimonio homosexual? Ah que ni hay madre, ni dios es sexual... ¿Un patrimonio homogéneno? No, que Dios y un cura no son dos cosas iguales, son heterogeneos... ¡Claro! Matrimonio heterosexual entre Dios y el cura! Pero si son dos hombres... Ah no que Dios es un Dios y no tiene sexo... ¿Entonces cómo tienen los curas los hijos, si no pueden tener sexo con Dios? ¿Los adoptan? ¿Los tienen fuera del matrimonio? Esto es... ¡¿Le ponen los cuernos a Dios?! Si Dios se enterara... ¡Pediría el divorcio inmediatamente! Pobre Dios, lo que tiene que aguantar...

miércoles, 9 de noviembre de 2005

Vikingakunga (Camuflaje)

Sentado en mi butaca, con arena en los pies y unas gafas de sol de Decathlón, miro como a lo lejos, en el horizonte, empieza a asomar un barco; nada reseñable. No mientras no se acercó a la costa.

Ver aparecer un barco por el horizonte es normal. Que en vez de ser de hierro o de madera sea de cristalitos como las bolas de discoteca, cuando menos, es para mosquearse; que del barco vikingo cubierto de espejitos se baje una tia con un gorro con cuernos, una minifalda de pieles, medias de rejilla y un cuerno lleno de cerveza, es para pensar que, o es la capitana del barco y lleva tal pedo encima que no sabe ni donde está, o que es el nuevo anuncio de Águila Amstel.
Chorreando la ropa y con taconazo de 10 centímetros, recorre a malas penas el trecho de arena que me separa de la playa, se quita las gafas de sol, se echa hacia atrás la melena morena que le tapa los ojos, y me dice:
"¿Sabes si Portugal queda muy lejos?".

"Mmmm, viniendo como has venido de poniente, Portugal te lo pasaste hace unos 700 kilómetros".
"Joder que putada... cuando yo llegue a Portugal a comprar la toalla ya estaré seca".

"Bueno, pero tendrás una toalla de Portugal".
"También tengo un caniche y lo único que hace es follarse los cojines del sofá".
"Mientras no te intente follar a ti...".
"Sabe que si lo hace me lo cenaré hecho hamburguesas".
"Aaaaaam... ¿Y no tienes calor con esas pieles en la falda? Porque con el sol que hace...".
"No, es que las suecas somos de conejo frio, y a falta de zanahoria, buenas son pieles para darle calor al animal en cuestión...".
"¿Y porqué llevas el barco cubierto como si fuera una bola de discoteca?".

"Bah, es una pijada, para camuflarme. Es que de madera canta mucho. Pero es reversible, mira. Si me toco la teta izquierda, ¿ves? los espejos se dan la vuelta y es una galera vikinga de madera. Ahora, me toco la teta derecha, y se vuelve a quedar como una bola de discoteca".
"Acojonante".
"Y eso no es todo, el dragon de la proa echa por la boca luces laser".
"No te creo".
"Pues si, pero ahora no te lo voy a demostrar, que la última vez que lo hice cerca de la costa me multaron por contaminación lumímica".
"Ya. ¿Y donde compraste la cosa esa?".
"No me lo compré, me tocó en un rasca y gana del Ikea".
"¿Y qué habías comprado si no es indiscrección?".

"Pues un Belén".
"Y te tocó un barco-discoteca?".

"Ay, paletos del sur... Es que en Suecia los Belenes son en un barco vikingo. Los personajillos están en el barco, y en vez de un ángel, tienen en el portal del camarote una bola de discoteca. Y luego vienen tres cajeros de Ikea con muebles plegables y menús bistros para adorar al niño...".
"Menudo portento".
"Y eso no es todo, los pastores cantan Waterloo".
"Qué navideño todo...".
"¿Verdad? Es una maravilla".
"Si tu lo dices... ¿Y estás segura de que por aquel entonces ya conocían a ABBA en Palestina?".
"Absolutamente".

"¿Y teneis discoteca, jacuzzi y esas cosas que suele haber en Gran Hermano?".
"Ya lo creo, incluso tenemos un set de maquillaje como el de Inma".

"Y lo usais?".
"Si, pero para drogarnos".
"A estas alturas de la conversación ya ni me extrañaría...".
"Claro, a mi me parece normal".
"A tí te parece todo normal".

"En absoluto, tu eres lo más raro que he visto en años... ¿Una persona sentada en una butaca de playa con gafas de sol y toalla verde, tomando el sol en pleno mes de Julio mientras habla con Lena Philipsson con faldas de pieles, un gorro de vikingo y un cuerno de elefante lleno de cerveza en la mano? No me lo creería si no estuviera aquí. De hecho creo que son efectos secundarios del maquillaje de Inma".
"Ese es mi gran problema, que no se qué es lo que me he tomado para acabar en esta situación".

"Bueno, siempre puedes subir al Abbarco".
"¿Abbarco?".
"Si coño, Abbarco, además está lleno de suecos".
"Como sean todos como tu...".

"No joder, yo soy la más seria porque soy la capitana y bebo Águila Amstel, los demás son más deshinibidos, por eso no te preocupes".
"No si no me preocupo por eso, me preocupo por mí... Pero, ¿a dónde vais exactamente si se puede saber?".
"Hombre, yo le dije a mi marido hace cuatro meses que bajaba a comprar tabaco...".
"¿Y dónde piensas comprar el tabaco?".

"Pues no lo sé a ciencia ciencia, porque me he olvidado el monedero en casa... no te digo más...".

[Han jobbar i affär][Lena Philipsson][Jag ångrar ingenting]

Continuará...

martes, 8 de noviembre de 2005

Tardes de reflexión

El gris domina al otro lado de la ventana, haciendo percusion con su lluvia sobre los cristales de mi ventana. Miro, desde ese angulo protegido, cómo las personas, vestidas tambien de gris, corren por las calles, huyendo del gris del cielo sin pensar q siguen llevando el suyo a cuestas.
Las miro... y pienso en cómo serán sus vidas. Hay una mujer de unos 50 años en la parada del autobus, va vestida de rojo, resalta entre la lluvia y los demás seres grisaceos q la rodean. Me pregunto si será feliz. Me la imagino siendo la más simpática de su grupo de amigas, siempre con la sonrisa en la boca, ocupando todo su espacio. Tiene 1mirada pensativa y expresion de tristeza acostumbrada, aquella que siempre está pero con la que puede reir, como un extrabagante amigo fiel.
Miro ahora a un hombre vestido con gabardina beige q sube con paso rápido la calle, protegiendose con un periódico la cara. Lleva un paso firme, no puede ver lo que hay delante de su cara por el periódico, pero aun asi camina con la seguridad de quien sabe exactamente que ese paso que está dando es el paso que quiere dar.
Mi vista se pierde con él al final de la calle y, abrazada a una enorme manta, salgo a la terraza. La lluvia me moja la cara y, en ese momento siento una increible paz, sensacion de estar formando parte de un todo, que todo lo que he hecho me ha traido aqui, que yo tambien di los pasos que queria dar. Cierro los ojos, respiro el olor a mojado, y al abrirlos me parece que el cielo no es tan gris, que la lluvia baila con el viento. Miro a la parada y me encuentro con los ojos de la mujer de rojo, que me devuelven la sonrisa. Quizás ella tambien haya comprendido que las personas somos como esta lluvia, ella mecida por el viento y nosotros por el tiempo.

jueves, 3 de noviembre de 2005

Baladas

Al fín llegó Noviembre a nuestras vidas. Un mes de película. Una película que empieza con el guión trastocado de como yo lo preveía inicialmente, pero un guión a fín de cuentas.
Volver a disfrutar, volver a pelear. Volver a respirar, volver a caminar. Volver, simplemente. Volver a sentir las cosas nuevas, volver a disfrutar de los pequeños colores de las hojas ocres que anuncian el invierno.
Creo que en estos momentos respiro una mezcla de aire, entre campo y ciudad, responsabilidad y culpabilidad, inquietud y tranquilidad. Me siento diferente, a veces me parece que el reloj no pasa, no porque no pase, sino porque quizás no soy consciente de ello. Me da igual la hora, me da igual el día, me da igual la fecha, simplemente, si. Camino por un camino de letras ocres, nado en un mar de hojas caídas de los árboles. Y reflexiono sobre la vida en general.
Hace unos días comentaba acerca de qué es más importante, la coherencia o la cohesión. Yo respondí que la cohesión, y lo puedo argumentar, pero lo cierto es que no tengo ni la segunda ni la primera. Simplemente soy una consecuencia de mi mismo y de mis propias elecciones, y reflexiono sobre si no seré un capital gastado, un cheque al portador mal usado, o si realmente mereceré ese depósito de capital que voy acumulando últimamente en algunos sectores de manera anómala.
De momento, me tengo que conformar con cruzar la autovía por encima, por el paso peatonal, oyendo crujir las hojas que crujen bajo mis pies, oyendo como los vientos fríos silban a mi alrededor, sin saber muy bien a ciencia cierta si es una cosecha justa o es simplemente fifticia.

[Sentir][Luz Casal][Un mar de confianza]