Y te han olvidado

Y te han olvidado. Les has dado miles de alegrías durante la temporada estival, sensaciones inolvidables, momentos únicos que muchos recordarán el resto de sus vidas. Pero te han dejado sola, usada. Quizá te culpan de ser testigo de los miles amores que se han separado. De las miles de miradas que ya no se ven. A lo mejor te ven cómplice de la vuelta al trabajo, te odian por lo que tienes y que ya no pueden disfrutarlo. O te atribuyen la lluvia como venganza. Se fue todo el mundo y te quedaste sola con tu arena sucia, tus hamacas usadas y tus nativos muy cansados. Ellos, son los únicos, que te han sido fieles y lo serán. A tu vera aguantan los más duros inviernos en el que tu oleaje golpea sus casas. Algo que, por otro lado, sirve para limpiarte de todos los meses de concentración de parásitos. Ellos nunca te valorarán, sólo eres un lugar para dorar su alma, dejar su cansancio y basura en tus piedras. Yo me fui de tu lado, pero vuelvo todos los inviernos para contemplarte y darte mi cariño. Parece que lo sientes porque tus olas se convierten en una obra de arte en los meses de más frío mientras te contemplo desde la silla que siempre me guardas.